Conmoción y reacción. Familiares y vecinos del barrio Colombia Granaderos no dudaron en salir a la calle cuando se enteraron de la desaparición de una menor de 8 años. El hecho ocurrió pasadas las 20 del martes. Luego de nueve horas de incertidumbre, volvió a reencontrarse con sus padres y señaló que habría sido secuestrada y abusada. La Justicia investiga lo sucedido.

La niña vive junto a sus padres en una vivienda ubicada en la intersección de Las Heras y Chacabuco. Según denunció Carlos -el padre-, la que niña se fue a la casa de una amiguita, distante a una cuadra de la morada. Es en ese momento donde la desesperación se apoderó de los familiares y vecinos de la niña que comenzaron la búsqueda. No alcanzó con el aviso a la Policía. Se organizaron para diagramar un rastrillaje por la zona. Con el paso de las horas y al ver que no había resultados positivos, decidieron cerca de las 23:30 cortar la avenida Independencia y Chacabuco.

Allí realizaron una larga protesta con quema de neumáticos. De la movilización participaron alrededor de 50 personas y época pudo registrar imágenes exclusivas de la ira de la gente. Tras nueve horas ausente de su hogar, la niña apareció.

El padre de la pequeña, dio algunos detalles de lo que vivió su hija. Denunció que fue secuestrada por dos hombres y una mujer. Agregó que de acuerdo al testimonio de la niña la habrían “la manosearon pero no la violaron”.

Carlos además informó que su hija fue forzada para ingresar a una camioneta Eco Sport, de color negro y con los vidrios polarizados. En la camioneta iban dos hombres que hablaban otro idioma y una mujer que era la que hablaba con ella.

Según contó el hombre, por datos dados por su hija, la chica que iba dentro del vehículo era rubia, de ojos claros, y los dos hombres tenían pasamontañas.

“Le dijeron a mi nena, que no hable, que se quede callada, sino la iba a matar, le ataron, no le llegaron a pegar, sólo la retaban, pero nada le llegaron a hacer, sólo la manosearon.

En el Hospital Pediátrico me dijeron que no tiene lesiones internas, dice que la chica le sacó la ropa y la manoseó, y en un momento le dejaron sola en la camioneta”, indicó indignado.

“La dejaron en el mismo lugar donde la levantaron, a cinco casas de mi casa. Los serenos dijeron que la bajaron y se dieron a la fuga, ellos vieron una camioneta EcoSport, y coincide totalmente con lo que contó mi hija”, señaló.

“Apareció a las 5 de la mañana y se perdió a las 8 de la noche. Estuvimos buscándola con los vecinos por todos los barrios, por costanera, el río, parque Mitre, Cambá Cuá, recorrimos todos los montes y los baldíos. Nunca vimos la camioneta por el barrio, se ve que andaban, la vieron y la agarraron al boleo no más”, sostuvo en declaraciones a Radio Dos.

“Hicimos la protesta porque no teníamos respuestas, sólo nos dijeron que la andaban buscando como no la encontramos empezamos a protestar”, remarcó Carlos.

Tras el reencuentro con sus padres, la nena fue derivada a la Dirección de Delitos Sexuales de la Policía provincial.

Piden cautela

La investigación recayó en la juez de menores Rosa Esquivel de Iglesias. En declaraciones radiales la magistrada explicó que aún no se determinó si la niña fue secuestrada, y pidió cautela en el tratamiento del caso. Por otra parte reveló que no se detectaron lesiones en el cuerpo, aunque no descartó ninguna hipótesis.

“En primer lugar se deben cumplir con la diligencias establecidas por el juez de instrucción de turno ante este tipo de hechos con examen físico, psicológico, psiquiátrico, los jueces tienen también la potestad de solicitar este tipo de exámenes, tanto de la niña como de sus progenitores, porque en este caso por ejemplo no tenemos identificada ninguna persona hasta la fecha. Tampoco se puede determinar ante qué tipo de hecho ilícito nos encontramos”, explicó.