En un inusual gesto por conocer la opinión de los ciudadanos, el primer ministro de Noruega, Jens Stoltenberg, se hizo pasar por conductor de taxi para escuchar las inquietudes de sus posibles votantes.

El video, publicado a un mes de las elecciones legislativas en las que su coalición de centroizquierda podría perder el poder, muestra al primer ministro de "incógnito" con uniforme y anteojos de sol hablando con electores anónimos.

El tabloide Verdens Gang (VG) reveló sin embargo este lunes que cinco de los 14 pasajeros filmados con cámara oculta habían sido elegidos previamente en un casting en la calle, aunque no sabían de qué se trataba.

"Son cinco personas a las que pedimos si querían participar en un vídeo para el partido laborista y sólo sabían que iban a subirse a un taxi", confirmó Pia Gulbrandsen, una portavoz del partido.

"Su espontaneidad era real cuando se dieron cuenta de que el taxista era el primer ministro", añadió.

Cada persona recibió 500 coronas (unos 65 euros) "como muestra de agradecimiento", explicó el partido laborista, y ninguno de los pasajeros pagó el viaje porque Stoltenberg no tienen licencia de taxi.

Stoltenberg, en el poder desde 2005, está todavía muy por detrás de la derecha en los últimos sondeos publicados para las elecciones del próximo 9 de septiembre.