Mientras cumplen diez años en escena, regresados de la gira que los llevó por escenarios de todo el mundo (entre ellos Nueva York, Londres y Moscú) la agrupación de arte escénico Fuerzabruta vuelve a presentarse en la sala Villa-Villa con su espectáculo "Wayra", en el que confluyen algunas de las características más contundentes con las que conquistaron a su público, cada día más fiel y entregado.

El show se asienta sobre una base conceptual que pone acento en la alienación urbana y una fuerza (bruta) visual que se sostiene en el desenfreno constante para revolearle la cabeza al espectador a puro nervio.

La sala Villa-Villa del C.C.Recoleta, fundada por el ya mítico grupo De la Guarda (germen de Fuerzabruta) en homenaje al show que llevó ese mismo nombre, cobija a un tumulto de fans e iniciados que a lo largo de poco más de una hora viven el vértigo de un espectáculo que inic"ia con percusión y cantos guturales para dar paso a un relato que bordea lo épico sobre el hombre y su entorno cotidiano y frenético.

Los fantasmas propios y ajenos, lo onírico como escape del derrotero diario y la vuelta a la placenta como juego ideal parecen ser algunas de las ideas que mueven a "Wayra", término de origuen quechua que dispara sensaciones a pulso de infarto.

"Queremos quebrar el sometimiento intelectual del lenguaje", dicen a modo de manifiesto en su página web oficial, y lo cumplen, ponen a mano de quien se anime a la experiencia una artillería de elementos escénicos de nivel internacional, con una puesta deslumbrante y un perfeccionismo que va más allá de la obsesión.

Hombres y mujeres caminando por el aire, una pileta suspendida a pocos centímetros del público con neo sirenas conectándose con la gente y escenas de disfrute explícito son parte de un show que cachetea las neuronas y sacude los sentidos. A modo de ejemplo, quien esto escribe fue arrastrado al medio del pogo-clímax por una de las integrantes del dream team y costó mucho querer salir de ahí.

Fuerzabruta promete, cumple y dignifica. El mundo del espectáculo tiene aquí a uno de los mejores créditos locales. Que las entradas para este show estén agotadas hasta julio próximo no es casualidad.