La Municipalidad de Corrientes decidió ayer anoticiar al personal local de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (SEDRONAR), que el convenio que habían firmado con el Estado nacional para su permanencia en las instalaciones del Dispositivo Territorial Comunitario (DTC) del barrio Independencia había terminado y se iba a proceder a una «reorganización» para garantizar la prestación de los múltiples servicios en beneficio de cientos de familias de la zona.

La acción fue definida como una especie de «desalojo» por parte de sectores de la oposición que involucró duras acusaciones de algunos funcionarios locales con cargos nacionales. Sin embargo, tras los entredichos, diario época pudo saber de fuentes oficiales que se llegó a un acuerdo y firmaría un nuevo convenio en un plazo máximo de 15 días para volver a hacer uso compartido de las instalaciones ubicadas sobre Calle 658 al 2100.

Por su parte, el subsecretario de Salud del Municipio, Rafael Corona, explicó en declaraciones a este medio que se encuentran esperando una respuesta final del SEDRONAR a nivel nacional para continuar con el convenio «porque el Municipio tiene la responsabilidad» de garantizar los servicios que se desempeñan habitualmente y en la actualidad el acuerdo no existe porque «venció» el 29 de noviembre.

«Vamos a continuar y garantizar todas las atenciones hasta que se active un nuevo convenio con la organización gubernamental», aseguró. Además confirmó que hoy tendrán una nueva reunión con el personal y que este continuará asistiendo al predio.

¿Qué dicen desde el SEDRONAR?

«Quedamos en que el equipo, formado por 34 profesionales consolidados hace 7 años, seguirá trabajando en el DTC junto con personal de la Comuna», reveló a época una fuente del SEDRONAR. Al mismo tiempo, manifestó que la dirección nacional, al enterarse del caso, decidió avanzar rápidamente con la renovación del convenio.

«Lo bueno es que existe una voluntad de avanzar por parte del Municipio. A la vez que reconocieron la experiencia y profesionalismo del personal», dijo la voz consultada.

En la actualidad, existen 150 personas que se tratan por distintos casos de consumo problemático y aseguran que no pueden cambiar de terapeutas «de un día para el otro». «Estamos trabajando con personas que tienen un proyecto de vida. No es una fábrica», analizaron.

En un comunicado, Corona anticipó que «se ampliará la prestación agregando otras actividades en territorio, respetando los siguientes ejes: mujer, territorio y jóvenes».