El caso había conmocionado a la ciudad de Goya un nene de 9 años había denunciado que su padrastro lo castigaba “a los manguerazos” si no vendía una cantidad determinada de churros.

El aberrante hecho ocurrió en 2019 y  después de más de un año la Justicia determinó que el acusado cumpla un año y medio de prisión, pena que deberá cumplirse en la Unidad Penal N°1 de esta Capital.

El  menor era obligado por su madre y padrastro a vender churros en la calle, y si regresaba con parte de la mercadería, era víctima de brutal castigo. En octubre de 2019 el pequeño pidió ayuda a a personas y medios locales. La Justicia actuó de oficio.

Con información de TN Goya