La víctima habría consumido alcohol y drogas y padecía de “exaltación violenta”. Los paramédicos del 107 se negaron a atenderlo. Sufrió dos paros cardíacos camino al hospital.
Un hombre murió luego de descompensarse. La Policía lo llevaba al Hospital Escuela, mientras le realizaba maniobras de RCP. Minutos antes había protagonizado una violenta pelea contra otros vecinos de su barrio, en la que recibió todo tipo de golpes. Los primeros paramédicos que llegaron al lugar, se habrían negado a atenderlo porque estaba “muy violento”, indicó la Policía.
Al parecer, la víctima estaba bajo los efectos del alcohol y el consumo de narcóticos. Ahora, la familia de la víctima niega la versión policial y, aseguran que la víctima reaccionó a una agresión sufrida por su madre.
La Justicia ordenó una autopsia al cadáver.
El hecho sucedió alrededor de las 23:30, en inmediaciones de la avenida Cartagena y su intersección de la calle Resoagli, en el barrio Irupé. Allí un altercado entre vecinos terminó de la peor manera, cuando un grupo de ellos, atacó a piedrazos la casa de A. Sena (30), hiriendo a su madre en el rostro.
Según la versión policial, a la que tuvo acceso época, cuatro efectivos policiales GRIM 2 respondieron a la alerta de la red interna policial, tras varios llamados al 911 y, se encontraron con Sena herido y sangrando. Junto a él, sujetándolo, se encontraba su hermano; quien relató a los policías que sólo intentaba alejarlo de la pelea.
Lo cierto es que Sena estaba malherido y necesitaba urgente asistencia médica. Por ellos los policías pidieron a través del 911 se canalice la ayuda y el móvil Nº2 de la DES 107 se hizo presente en el lugar; aunque sólo unos minutos. Según el informe policial, el paramédico a cargo de la ambulancia se negó a atender al herido, “debido a su estado de exaltación violenta” y se retiraron, dijo la Policía.
Posteriormente, fue convocada la comisaría 21 para que mande personal a la zona. Otros dos efectivos llegaron a la escena y acordaron con dos de los hermanos de Sena, trasladarlo hacia la comisaría para resguardar su seguridad física; pero ni bien intentaron descenderlo del móvil, el hombre se descompensó por completo.
Dos paro cardíacos
La orden fue trasladarlo rápidamente en el móvil, debido a que la ambulancia que volvieron a pedir, demoraba sustancialmente. La oficial subayudante Mazcarella y el sargento Oviedo fueron realizándole maniobras de RCP, dado que Sena habría sufrido un paro cardíaco. En el camino lograron recuperarlo y lo ingresaron con vida. Según fuentes médicas, dentro del hospital sufrió una segunda descompensación cardíaca, de la que ya no pudo volver.
Tras el fallecimiento, la justicia ordenó que se le practique una autopsia al cuerpo de Sena, para determinar si fueron los golpes, o el consumo de estupefaciente con alcohol, o la mezcla de ambos, lo que determinó la muerte de la víctima.
Ahora, la Policía deberá identificar a quienes participaron de la reyerta y propinaron los golpes a la víctima, ya que la Justicia habría caratulado la causa como “lesiones graves en riña, seguida de muerte”.
Diarioepoca.com