El inmueble, ubicado en la Ruta 12, posee las condiciones necesarias para realizar las inspecciones de inocuidad de forma óptima, con el objeto de preservar la salud de los vecinos de la ciudad, que son los consumidores finales de los productos.
El Intendente capitalino inauguró un nuevo Centro de Control Bromatológico municipal, lo cual significará mejores condiciones para los agentes municipales que efectúan esos controles y, en consecuencia, un mayor cuidado de la salud de los vecinos que consumen los alimentos que adquieren en las góndolas de los supermercados o en las carnicerías.
Este nuevo galpón para fiscalización de alimentos está ubicado en la Ruta Nacional Nº12 kilómetro 1028,6. El acto inaugural fue encabezado por el intendente Tassano acompañado por funcionarios municipales.
“Estamos muy contentos porque este era un gran anhelo. En el galpón que teníamos el ingreso era inadecuado, había muchas quejas de los transportistas, y acá, con este trabajo en conjunto con nuestro equipo del Municipio, de Bromatología y de Higiene Urbana, más la ACOR, se pudo llegar a este lugar y se lo funcionalizó”, valoró inicialmente Tassano tras el corte de cintas.
“Es un lugar muy cómodo para una tarea que es vital, que es el control de todos los alimentos que ingresan a la ciudad, así que esto tiene que ver con la salud, con la sanidad, con la no contaminación y es muy importante. Son cuestiones de fondo que hacen al funcionamiento y a los cuidados verdaderos de una ciudad y significa la protección de la salud de nuestros vecinos”, recalcó al respecto.
Luego de recorrer el lugar y tomar contacto con los trabajadores del área, el Intendente ponderó diversos aspectos positivos de la mudanza a este nuevo edificio. “Esto genera amigabilidad con el transporte y un acercamiento con los vecinos, porque los estamos cuidando. Como médico, sé que hay muchos procesos que son invisibles y que no tienen valor electoral, pero sí un valor profundo en cuanto a las condiciones que un Municipio debe brindarle a la ciudadanía, entonces esto me pone muy contento”, finalizó el Intendente.
“Este es un galpón de control de los alimentos que ingresan a la ciudad. Por lo general, el 80 por ciento de lo que ingresa es de origen muy distante, como Córdoba, Santa Fe o Buenos Aires, por ejemplo, y esta distancia hace que pueda haber problemas en la manipulación de los alimentos, accidentes o hechos fortuitos que hagan que estos no lleguen en las condiciones óptimas a los ciudadanos de Corrientes”, explicó el director de Abastecimiento y Transporte Alimentario de la Municipalidad, Diego Calvano, quien estuvo presente en el acto de apertura.
“Entonces, la función de este Centro Bromatológico es fiscalizar y controlar que estos alimentos sean aptos para el consumo humano. Es un trabajo que se realiza junto con la ACOR y con la Subsecretaría de Higiene (Urbana y Uso del Espacio Público) de la Municipalidad”, complementó Calvano.
José Ramírez, agente de Bromatología municipal, se refirió positivamente a la mudanza al nuevo galpón. “A este centro de control bromatológico ingresan los transportes y se controla la inocuidad de los alimentos, que estén en condiciones aptas de consumo humano, en cuanto a la temperatura y también a las condiciones de higiene en que vienen y la fecha de vencimiento”, explicó inicialmente.
“Este galpón está más acondicionado para el trabajo que se realiza. El anterior lugar estaba deteriorado y los propios transportistas protestaban para ingresar a ese centro de control, así que este es muchísimo mejor”, resaltó.
Delia Córdoba es otra trabajadora del Centro Bromatológico que exteriorizó su satisfacción por el cambio logrado, “estamos muy agradecidos, porque en el anterior lugar no estábamos en condiciones, tanto el personal como los transportistas. Ahora con esto estamos bien”, sostuvo.
Juan Carlos Arriola es un inspector de Bromatología que también tuvo acepciones positivas acerca de la mudanza al nuevo inmueble, “en cuanto a las condiciones edilicias, ha mejorado en calidad y también el personal está conforme y de acuerdo”, dijo.
“Acá se controlan los transportes que vienen de la ciudad y de todo el país, en cuanto a líneas generales de carnicerías y supermercados”, explicó el inspector. “Tenemos medidas de seguridad como matafuegos, mangueras de emergencias, techo aislante y oficinas acondicionadas. La mejora es grande, también en las oficinas, los sanitarios y el galpón en sí, que está bien adecuado para el trabajo que nosotros realizamos”, consideró.