La administración capitalina analiza cambios en el servicio de estacionamiento medido. Tanto es así que producto de recientes operativos realizados por la Subsecretaría de Transporte, en el casco céntrico, fueron labradas 800 actas de infracción por falta de tarjetas o porque éstas no estaban debidamente marcadas por los conductores.
El subsecretario de Transporte, Marcelo López Lecube, confió que “este resultado surge del cruzamiento de datos de la primera semana. El panorama no es alentador porque se hicieron operativos a razón de dos horas por día. Hay que tener en cuenta que en el segmento definido para el estacionamiento medido del casco urbano hay 1.700 lugares disponibles por hora”.
En ese sentido, el funcionario apreció que “estos relevamientos los solicitó el Ejecutivo para darle una solución al tema del aparcamiento. Hay mucho por hacer, pero hemos notado que a partir de los controles muchos conductores empezaron a rellenar y controlar su tarjeta”.
Aquellos vehículos a los que se les comprobó la infracción ya fueron notificados y luego serán sancionados con multas que van desde los 20 hasta los 200 litros de nafta, como lo establece el artículo Nº62 de la Ordenanza Nº2.081. Significa que la multa es hasta 1.200 veces superior al valor del estacionamiento público que cuesta tan solo $2 por hora. Los valores los determinará al fin y al cabo el Tribunal de Faltas, organismo competente para ello.
Este sistema contempla a los vecinos frentistas para que utilicen los espacios sin abonar aranceles, pero para ello deben tramitar -sin excepciones- un permiso que lo valide. Los interesados deben realizar los trámites en Artigas 1.100, entre San Martín y Bolívar.
Fuente: Época